En tal sentido, el juez explicó que los términos no se encuentran vencidos debido a que durante la primera audiencia en que se llevó a cabo la solicitud de libertad condicional para las dos sindicadas, el proceso todavía permitía que la Fiscalía presentara un nuevo fiscal de apoyo debido a la magnitud de la investigación y la importancia del caso.
Por su parte, la defensa no dudó en manifestar su inconformidad con la determinación anunciada declarando que volverá a apelar la medida con idénticos argumentos, de conformidad a lo dispuesto en las disposiciones legales vigentes.
A su turno, Jaime Lombana, abogado de la familia Colmenares, cuestionó el hecho de que a pesar de que Jaime Granados, abogado de Laura Moreno, visitaba a todos los medios de comunicación y en esta oportunidad no se había presentado a la diligencia.
“Me llama la atención de que a cada interpretación de la defensa se le busca poner obstáculos en la rueda de la administración de justicia para dedicarse a los ataques personales”, aseveró el jurista.
LA GOLPIZA
Respecto al tema de si los escoltas de Laura Moreno serían o no responsables de la muerte del joven estudiante, Lombana precisó que inicialmente se le “quisieron propinar una golpiza”, en la que terminaron sobrepasándose de manera que necesariamente tuvo que existir la colaboración de otras personas a efectos de trasladar y mover el cadáver sin confirmar si dichas personas hacían parte o no del esquema de seguridad de la joven.
“Ya lo demás son apreciaciones del doctor Granados para tratar de defenderse”, insistió el abogado de la familia Colmenares haciendo referencia a las declaraciones de su oponente en el caso, quien el pasado jueves no dudó en manifestar que las declaraciones respecto a la participación de los escoltas de Moreno en el presunto homicidio eran producto del desespero.
“Él sabe la verdad, yo le ruego al doctor Granados que convenza a su cliente de contar la verdad para evitarnos tanta dilación y controversia, además de un país molesto por el asesinato de un niño, en el que la sociedad no debe perdonar el que se le haya querido engañar con la hipótesis de un suicidio cuando las mismas personas que nos engañaron lo asesinaron”, declaró en tono vehemente el abogado.
Pese a la ratificación de la medida, Silvio Quiñones, abogado de Jessy Quintero, aseveró que la defensa insistiría en procura de alcanzar la libertad condicional de su clienta, declarándose a la espera de la determinación que tomara el juez 11 de conocimiento, durante la diligencia programada para el próximo 12 de marzo respecto a la nulidad de la totalidad del proceso, sobre la que advirtió que apelarán un eventual concepto negativo, de manera que sea el Tribunal Superior de Bogotá el que se pronuncie al respecto.
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